A continuació reproduïm un article d'en Pere Ortega publicat recentment a Público.es sobre el presupost militar espanyol:
Las trampas del presupuesto militar
Pere Ortega, Centre d’Estudis per la Pau
La
aritmética es una ciencia exacta, pero los números cada uno los hace bailar a
su manera. Esto es lo que pasa con las cuentas del presupuesto de Defensa: en
los últimos cuatro años, el Gobierno nos ha presentado un presupuesto con unos
números que representan un descenso respecto al año anterior. Luego, en el
transcurso del ejercicio, esas cifras se han visto ampliadas con aportaciones
extraordinarias, y al finalizar el ejercicio, acaban con un incremento que,
según el año, oscila entre un 15% y un 20%, y que en el último decenio han
supuesto un promedio de 1.400 millones de euros anuales.
Este
mismo año 2012 se han superado todos los récords, se ha concedido un crédito
extraordinario de 1.827,7 millones para pagar los Programas Especiales de
Armamentos (PEAs), los cazas Eurofigther, los blindados Leopardo y Pizarro, los
diversos buques militares, los helicópteros Tigre y NH-90, y así hasta 19
programas de armas. Pero, además, se han suplementado otras partidas, como es
el caso de las operaciones militares en el exterior, denominadas de manera
eufemística “de mantenimiento de la paz”, cuando lo que están llevando a cabo
en Afganistán es apoyo a una de las partes en una guerra civil; o en el océano
Índico, donde protegen a los atuneros que expolian los caladeros frente a
Somalia. Una partida a la que cada año se le asignan unos insuficientes 14,36
millones, que acaba el año superando los 850 millones y que es suplementada
desde los Fondos de Contingencia, un cajón de sastre de donde se echa mano para
ese pago. Otra fuente de ingresos es la generada por la venta de patrimonio
público en manos de Defensa, que es uno de los mayores propietarios de
patrimonio del Estado: cuarteles, viviendas, campos de tiro, bases e
instalaciones diversas. En los últimos años se ha permitido la enajenación de
dichas propiedades, lo que este año ha aportado 243 millones a las arcas de
Defensa. Una cuantía que se destina, mayoritariamente, al pago de armamentos.
Estas modificaciones, que han
suplementado el presupuesto de Defensa en 2.826,7 millones han supuesto un
incremento, hasta septiembre de 2012, de un 27% respecto al presupuesto
inicial, cuando, en boca del Gobierno, se había anunciado que disminuía un
8,8%. Una rebaja que se ha convertido en una estrepitoso engaño, pues hay
recursos para suplementar el gasto de las fuerzas armadas pero no para gasto
social o para el desarrollo de la economía productiva.
La
previsión de pago del Ministerio de Defensa para el próximo año respecto de los
controvertidos PEAs, de los cuales se adeudan nada más y nada menos que 32.000
millones, es de 6,84 millones. ¿Ocurrirá lo mismo que en 2012 y, avanzada la
legislatura, se volverán a proporcionar más créditos extraordinarios para pagar
las armas? La respuesta la ha dado el secretario de Defensa, Pedro Argüelles,
ante la Comisión de Defensa del 8 de octubre, donde afirmó que no descartaba
recurrir de nuevo a créditos para hacer frente al pago de esas armas. Se puede
afirmar, por tanto, que la propuesta de disminuir un 6,7% el presupuesto de
Defensa para el próximo 2013 (hasta 6.913,6 millones) es, sin ningún
género de dudas, una falsedad.
Pero
también hay una segunda cuestión que tiene que ver con la manera de
contabilizar el gasto militar. La OTAN expone unos criterios sobre cómo los
estados miembros deben presentar las cuentas. Y, siguiendo esos criterios, se
debería tener presentes todos los gastos militares repartidos por otros
ministerios, como las clases pasivas militares, la mutua militar, las
contribuciones a organismos militares internacionales, el cuerpo militar de la
GuardiaCivil y las ayudas en I+D militar del Ministerio de Industria. Entonces
la cuantía se dobla y asciende a 13.708,3 millones. Si a ello se añade la parte
proporcional de los intereses de la deuda de Defensa -que en su conjunto, y
debido a la mala salud de la economía, aumentan de manera considerable- y se tienen
en cuentas las aportaciones extraordinarias que se suman durante el
ejercicio, el gasto militar para el año 2013 superará los 16.000 millones
de euros.
Los
apologetas de la defensa armada esgrimen, como principal argumento del gasto
militar, los enormes beneficios que reporta a la economía nacional la
producción de armamentos por los efectos del trasvase de tecnologías en I+D a
la producción de bienes civiles. Una especulación demostrada en contadísimos
casos, cuando, al contrario, está demostrado que el gasto militar entorpece el
crecimiento de la economía productiva, pues, como demuestran esos PEAs, genera
endeudamiento y déficit público.
Los
enormes recursos que absorben esos costosísimos programas de armamentos en la
España del 25% de la población activa en paro no responden a las necesidades
reales de seguridad de los españoles, sino al contrario, contribuyen a la
inseguridad, destruyendo la economía real.
Publicado por Público.es el 5 de noviembre de 2012
Pere Ortega Grasa
- Llicenciat en Historia Contemporània. Postgrau en Hisenda Pública de l’administració local.
- Coordinador del Centre d’Estudis per la Pau JM. Delàs de Barcelona.
- President de la Federació d’ONG per la Pau.
- Membre del Centre de Treball i Documentació.
- Professor del curs Conflictology de la UOC en l’assignatura Deconstruir la guerra.
- Investigador en temes de pau i desarmament ha participat en l’elaboració d’estudis i treballs històrics, econòmics i socials sobre aquestes matèries.
- Col·laborador del SIPRI.
- Autor o coautor dels llibres:
La societat noviolenta, Icaria 2012
L’OTAN una amenaça global, Icaria 2010
Mapa del militarismo en España, Icaria 2009
40 años de Justicia y Paz, PPC editorial 2008
Deconstruir la guerra, Generalitat de Catalunya 2008
El militarismo en España, Icaria 2007
Noviolencia y transformación social, Icaria 2005
El ciclo armamentista en España (1989-1999). Una panorámica crítica, Icaria, 2000
- Informes i recerques recents:
El complejo militar industrial. Un parásito en la economía española, Centre Delàs, abril 2012
La verdad del gasto militar en España 2013, Centre Delàs, ocrubre de 2012
La despesa militar de l’estat espanyol 2009, Centre Delàs de Justícia i Pau, 2009
Indústria d’Armes a Catalunya. Dels trabucs a l’aeronàutica, Centre Delàs, 2007
- Col·laborador habitual de diverses revistes i publicacions sobre temes relacio¬nats amb pau, desarmament, i relacions internacionals, he publicat nombrosos articles en diaris i revistes, en Público, Avui, Ara, Materials de Treball de Justícia i Pau, Mientras Tanto, Diagonal, Directa, Noticias Obreras i El Triangle.